lunes, 23 de julio de 2012

ALIMENTATE PARA PERDER GRASA

Para perder peso no es buena idea dejar de comer, eso ya lo he mencionado en alguna ocasión pero no solo hay que comer... además hay que comer adecuadamente. Aquí os dejo dos buenos consejos para que perdáis peso de forma razonable, segura y efectiva. AÑADE GRASA BUENA En situaciones donde no se ingiere prácticamente grasa, nuestro organismo detecta déficit de vitaminas liposolubles, fosfolípidos, colesterol, etc. y entra en un mecanismo de defensa, su reacción es protegerse, deja de utilizar la grasa como combustible y almacena grasa con mayor eficiencia. Esta es la razón por la que algunas personas al hacer dieta estricta no sólo no consiguen perder grasa, sino que incluso pueden llegar a acumular más. No olvides que en una dieta equilibrada, necesitas un 20% de aporte calórico de grasas, lo que equivale a unos 50 gramos para las mujeres y unos 75 gramos para los hombres. Añade “grasa buena” a tu dieta; si preparas una ensalada, rocíala con aceite de oliva, añádele aguacate y algunos frutos secos. Deja al menos una yema de cada tres huevos que ingieras. La leche semidesnatada es una buena opción. Toma pescados azules, son ricos en ácidos grasos omega 3. MODERA LA CANTIDAD DE HIDRATOS DE CARBONO Y AUMENTA LAS PROTEINAS. En la alimentación de hoy en día tendemos a consumir un exceso de carbohidratos y tenemos deficits en el aporte proteico. En muchos casos el problema de acumular grasa no es generado por la excesiva ingesta de grasas, sino por el exceso de hidratos de carbono. La ingesta de carbohidratos debe ir disminuyendo a lo largo del día y la proteína debe ir aumentando. El desayuno será rico en carbohidratos y la cena rica en proteína. Los carbohidratos deben ser en su mayoría de los denominados complejos: arroz, pasta, tubérculos, cereales, legumbres, verdura, etc. Si deseamos que nuestro organismo utilice la grasa de reserva será necesario bajar la cantidad de hidratos de carbono aportados en la dieta. Pero ojo, sin pasarte porque ya sabes que es la gasolina de tus músculos.

lunes, 2 de julio de 2012

Cuidado con Las dietas hipocalóricas!!!

El peligro de las dietas hipocalóricas Se basan en un balance energético negativo, provocan un déficit del aporte calórico restringiendo severamente algún nutriente. Provocan a corto plazo un descenso del peso y posteriormente, un efecto rebote metabólico no deseado, aumentando la masa grasa y disminuyendo la masa muscular. Que una dieta hipocorística resulte contraindicada depende de dos factores: que sea desequilibrada y o que el balance calórico negativo sea muy acusado. Una dieta hipocalorica no iquilibrada y desproporcionada es aquella en la que se bajan las calorías restringiendo las cantidades de un solo nutriente, por ejemplo, los carbohidratos, las proteínas, etc. Si eres una persona activa que desea quemar calorías haciendo ejercicio y sentirse saludable evita este tipo de dietas. El mito de los quema grasa Justo este es un aspecto donde los suplementos aun no han conseguido los tan perseguidos efectos “quema grasa”. En el mercado puedes encontrar desde los clásicos e inofensivos L-carnitina y Fat burners, hasta autenticas bombas quema grasas a base de excitantes que tienen el inconveniente de afectar al sistema nervioso. Hay que dejar claro que ninguno de estos suplementos constituye por sí solo un quema grasa, tan solo son intermediarios metabólicos que intervienen en el proceso de la oxidación de los ácidos grasos cuando sobre todo hacemos ejercicio. La L-carnitina tiene la función de introducir los ácidos grasos en el interior de la mitocondria celular para su oxidación, pero si no hacemos ejercicio, el ácido graso no se transportará por la sangre y llegará hasta la célula para eliminarse. Los excitantes como la cafeína, efedrina, teina, etc., si que tienen la propiedad de aumentar la secreción de adrenalina (aunque tiene el efecto no deseado de alterar el sistema nervioso) que a su vez degrada los adipocitos, los ácidos grasos se vuelcan al torrente sanguíneo, pero llegados a este punto si no necesitamos energía, vuelven a almacenarse en forma de grasa. Es decir, si no estamos moviéndonos, no es necesaria la degradación del ácido graso en la célula y el efecto quema grasa se pierde. Sin embargo, funcionan muy bien quemando grasa cuando se acompaña de la práctica del ejercicio. Realmente el mejor quema grasa es el propio ejercicio físico. Cansa mucho, lo sé, pero es lo que realmente funciona desde el principio de los tiempos y a largo plazo, cuidando tu salud y tu bolsillo. Personalmente he probado de todo.... y lo único que me ha funcionado es mantenerme en movimiento!!! No caigaís en engaños y activaros!!!!